¡Odio los Lunes ¡Por que nos afecta tanto la vuelta a la rut


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@DANTEX

26/06/2016#N60183

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CAMBIO DE HÁBITO

¡Odio los lunes! Por qué nos afecta tanto la vuelta a la rutina


En Argentina, el 72% de las personas siente mayor desgano este día. Se asocia a obligaciones, estrés e incertidumbre, pero también hay factores biológicos que afectan nuestro estado de ánimo. Aprendé a enfrentarlo de mejor manera

Es posible que seas una de esas personas que, sin saber el motivo, el lunes se levantan de mal humor, con mucha fiaca y tienen la sensación de que el primer día de la semana es más duro que el resto. O quizá seas de aquellos a los que ya les cambia el ánimo el domingo por la tarde al pensar que al día siguiente vuelven a trabajar o a estudiar. Puede, incluso, que te guste tu trabajo, que te sientas afortunado por tenerlo, y no entendés por qué, entonces, se te hacen tan duros los lunes.

Seguro que ya comprobaste que no sos la única persona a la que le pasa eso. Basta poner en Twitter, Facebook o Google la palabra lunes en diferentes idiomas para encontrar un sinfín de memes alusivos a la aversión y el estado de ánimo que suscita el primer día de la semana en multitud de puntos del planeta.

La forma de expresarlo cambia, pero el sentimiento no es nuevo. La canción I don't like mondays (No me gustan los lunes), escrita por Bob Geldof, lideró la lista de éxitos del Reino Unido durante cuatro semanas en el verano de 1979, poco después apareció el popular Garfield, que también es conocido por aborrecer los lunes. Y el Oxford English Dictionary, que dedica una entrada a definir San Lunes como "la renuencia a empezar a trabajar los lunes como consecuencia de la borrachera del domingo", se hace eco de un artículo publicado en The Scots Magazine en abril de 1753 que ya mencionaba la expresión y la costumbre de muchos comerciantes y artesanos de tomarse el lunes como festivo.

Hoy, 262 años más tarde, los trabajos y las costumbres son otros, y dicen los responsables de recursos humanos que el lunes no es un día de excesiva ausencia laboral injustificada, pero sí una jornada en la que cuesta retomar el ritmo del trabajo por la borrachera (en sentido amplio y fundamentalmente figurado) del fin de semana. 

Según un estudio realizado en Argentina por la consultora Bayton, el 72% de las personas tiene mayor desgano los lunes. Y el día también figura al tope del ausentismo laboral. Es que la fobia pega en el cuerpo... Seguí leyendo sobre la deuterofobia


Los especialistas aseguran que hay factores sociales, psicológicos y biológicos que inciden en la "crudeza" de los lunes y en la ansiedad anticipatoria que algunas personas sufren ya el domingo.

"En los países más pobres, las jornadas laborales alcanzan proporciones de vasallaje medieval. Son largas, incluyen traslados en transporte público deficiente o francamente peligroso, hay precarización laboral, y además, tener trabajo no asegura cubrir las necesidades básicas familiares. Enfrentarse con un lunes en ese contexto alcanza entonces proporciones épicas", explica la Adriana Yankelevich, supervisora del Servicio de Salud Mental del Hospital Tornú y Miembro de la Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires (APdeBA).


A eso se suma que el lunes es sinónimo de estrés, de horarios, de tareas, de prisas y de incertidumbre, porque es el arranque de una semana, de reuniones y de encargos que no sabés qué te depararán. Pero, en la cuesta arriba de los lunes también hay razones físicas que dependen mucho de lo que se haya hecho el fin de semana.


"Gran parte de la fobia a los lunes tiene que ver con las exigencias y el estrés laboral, por lo que los departamentos de Recursos Humanos pueden realizar programas de incentivo (remunerar especialmente el presentismo de los días lunes) o generar espacios para que los empleados puedan distenderse y así mantener el buen ánimo desde el principio y durante toda la semana. Hoy muchas empresas diseñan y aplican programas para reducir el ausentismo especialmente de los días lunes", comenta Graciela Peyrú, psiquiatra y presidenta de la Fundación para la Salud Mental, de España.


El organismo siempre entra en crisis cuando hay un cambio de condiciones o de ambiente -dicen los especialistas- y eso nos ocurre a diario y normalmente no pasa nada o apenas lo notamos porque nos adaptamos; pero si el cambio nos dirige hacia algo que no queremos, entonces la adaptación nos cuesta y lo vivimos con angustia. Por eso quienes sufren malestar los lunes lo primero que deben hacer es analizar el grado de agobio que les provoca y el motivo, porque no es lo mismo que sea una simple pereza o cansancio para retomar la actividad que sufrir ansiedad porque se acumula un exceso de estrés, porque a uno le aburre su trabajo o porque sufre un mal ambiente laboral.


"Cuando pasás del ocio a la rutina, sea después de las vacaciones, de un fin de semana o de un puente, el cambio cuesta, es normal, pero hay que analizar el grado y el por qué, porque hay personas que no es que les dé fiaca volver, es que entran en lo que yo llamo despido interior, es decir, que se desvinculan absolutamente de la oficina o de la función que realizan y la vuelta al trabajo los lunes se les hace tan cuesta arriba que les provoca angustia", coincide Margarita Álvarez, directora de marketing y comunicación de Adecco. Agrega que a veces la ansiedad de los lunes tiene que ver con problemas más complejos que conviene afrontar y resolver, como una mala relación con el jefe, una carga excesiva de trabajo o de responsabilidad o la falta de reconocimiento.

Sea cual sea la causa, dicen los expertos que el San Lunes tienen cura y que pequeños cambios en las rutinas cotidianas pueden hacer más llevadero el arranque de la semana.

*Analizar los motivos. Si la angustia por retomar la actividad el lunes es alta, conviene buscar las razones, ver qué miedo o amenaza la provoca, y tratar de resolverlo. Si la razón es que a uno no le gusta su trabajo pero no puede cambiarlo, dicen los psicólogos que ayuda mucho verlo como algo temporal y un medio para hacer otras cosas que a uno sí le gustan.


*Acabar bien el domingo. El primer paso para tener un buen lunes tiene que darse el domingo. Evitar comilonas, no dormir la siesta, dedicar la última parte del fin de semana a una actividad tranquila, hacer los preparativos de la semana con tiempo e irse a dormir temprano son recomendaciones destinadas a facilitar el descanso y arrancar el día siguiente sin estrés.


*No anticipar problemas. La ansiedad que muchos sufren el domingo a menudo obedece a que imaginan qué les pasará o qué les van a decir en el trabajo.


*Evitar las prisas. Dejar las cosas preparadas el domingo, levantarse pronto e ir al trabajo con antelación son rutinas que permiten no añadir estrés a los lunes.


*Convertirlo en un día especial. El lunes será más atractivo si se programan las tareas laborales que más motivan o si se incluye en la agenda alguna actividad gratificante, sea comer con un amigo, ir al gimnasio, cenar la comida favorita, darse un capricho o estrenar algo de ropa.


*Buen humor. Las emociones se contagian, así que mejor evitar comentarios negativos. Mejor empezar la rutina con humor.


*Delegar. Si la fiaca de los lunes tiene que ver con un exceso de trabajo o de responsabilidades y el estrés que esto supone, la solución será delegar tareas

 

Comentarios

@GRACIELA_GALES

27/06/2016



Que trabajador sos en tus trabajos! Como siempre sos genial ! Dantex o como te llamabas...!Gracias por todo lo que haces por la pagina! Me gustaria algun dia conocerte para darte las Gracias personalmente! Graciela.  
@DANTEX

27/06/2016



Hola Graciela :Ruben es mi nombre,creo que es lo que uno puede dar desde lo que uno cree y si ademas aporta algo a alguien doble efecto ,el agradecido soy yo a tu reconocimiento,en algunas salidas suelo participar lo que muy probable nos conoceremos.Gracias y mis Saludos