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Escrito por
@FITO

24/03/2013#N43021

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DUENDE - 1

En mi sueño, al entrar en el bosque, encontré un sendero. Angosto y chiquito, que iba serpenteando entre los árboles. Lo recorrí tranquilo, hasta llegar a un claro.  “¡Claro! -todos los bosques tienen un claro” - pensé.
Festejé mi ocurrencia sonriendo, de pronto a cinco metros míos, vi una casa. Pero no era una casa. Era una casa pero tenía una altura de… de treinta centímetros, no más. Pero tenía todo. Puerta, ventanas, cortinas detrás. Dudé en acercarme, pero poco a poco lo hice. Se abrió la puerta y vino hacia mí, flotando en el aire, un duende pequeño, con ojos brillantes y llenos de vida.
 
    ¡Hola! ¿Te perdiste?
 
Me preguntó con su voz ingenua, casi infantil. No supe que responderle, creo que le pregunté si era posible perderse en un sueño. La respuesta que me dio fue sencilla: “Cualquiera se puede perder en un sueño o en la realidad”.
 
    ¡No sé! ¿Te puedes perder en un sueño?
    Sí. Te puedes perder en tu sueño o en tu realidad. Ambos están en ti. Pero dime. ¿A qué has venido al bosque?
    No sé. Cerré los ojos, para dormir. Y me encontré en un bosque, encontré el sendero, al recorrerlo llegué hasta aquí. Sucede que estoy buscando la felicidad.
    ¡Pero la felicidad no se busca en un sueño!
    ¿Dónde buscarías tú la felicidad?
    Tampoco sé. Creo que la felicidad está dentro nuestro, por momentos aparece, por momentos no. Es un tema interesante, pero hay que ser paciente para encontrar la respuesta.
    Yo pienso igual. Pero hay veces que creo ser un gran nadador, capaz de cruzar un océano, pero en realidad estoy en el campo. Otras que soy un gran alpinista, con el equipo perfecto para vencer la montaña, pero no, estoy en un lago. Y es impotencia. Es no poder gritar que quiero la felicidad, aún en un sueño. Es tener todo delante de ti y sentir que una colina se interpone. Quiero saltar la colina y llegar. Quiero nadar en el océano de la alegría y conquistar la montaña de la felicidad… Dime duende. ¿Me equivoco?
    No. No te equivocas.
 
Puso cara de gran pensador y cruzando un brazo sobre su pequeño pecho, luego de levantar un poquito su gorra y con una ceja levantada me dijo:
 
    No. No te equivocas. Todos tenemos derecho a ser feliz. Pero, ¿Con quién vas a nadar en tu océano, con quién vas a subir la montaña?
    No, duende, ese es otro sueño. Y quiero tener un sueño por vez. Deja que despierte. Para poder tener el otro sueño. El único sueño que quiero tener.

 

Comentarios

@SIL_VANA

24/03/2013



 Gracias por despertar o sostener mi imaginaciòn !!!! Es importante como dice el duende:  La Felicidad està dentro de cada uno . Imposible hacer un viaje buscando,  si el ùnico , irrepetible  protagonista  que es uno , no se encontrò consigo mismo y la felicidad .   Silvana   
@ANDYNET

28/03/2013



 que lindo Rodolfo! gracias por compartirlo, me encantó