Amanezco a su lado

Me enternece usted
con su sabia manera de decir las cosas,
con la simpleza del que es autèntico,
mortal del viento y de la tierra,
del àngel y el demonio.
Usted se brinda a mis brazos
como una niña que busca refugio
a medianoche,
y yo feliz de abrazarla, me lleno de alegrìa
cuando usted me mira con sus ojitos silvestres
y entona una palabra tras otra
como para quien esa dulzura en cadena
es una virtud cotidiana.
Amanezco a su lado
y le juro que pierdo la identidad
llega la mañana compartida, y usted
asoma su abanico de pètalos salvajes
que condenan cualquier horror que se atreva
a llevarse la primavera
Uste me sumerge entre su alma
y desde esa profundidad
me cuida del mundo y de mi,
y yo, la imito como puedo
rara vez lo hago bien, discùlpeme,
sepa entender que aùn no puedo creer
esta nueva manera e vivir
EDU.

 

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