*El Efecto Frankenstein*

Cada vez es más frecuente el ver este tipo de acciones "por parte de los que se aman" entre comillas y mucho más común de lo que pensamos.
El ver familias disfuncionales es ya una moda.
Este fenómeno ha crecido imperceptiblemente y es muy común escuchar, "Yo vivo con mi papá o mamá y el (otro) vive con su novi@, este fin de semana me toca con mi..., y peor aún, ahora vivo con "el 5to nuevo compañero sentimental de mi mamá" o de mi... y así por el estilo.
Si supieran que somos responsables de las futuras generaciones de la sociedad, creo que lo haríamos mejor, con más responsabilidad, tino y madurez.

El efecto Frankenstein.

Así he denominado yo a esta conducta.
Basada en aquella novela clásica de Mary Shelley, quien gracias a una apuesta que hiciera Lord Byron, en su casa de Ginebra, ¿ de quién podría escribir una historia de fantasmas?.
Así nació el desafío, que ella aceptó.
Shelley había soñado a sus 18 años algo terrible y partió de allí para crear esta historia que ve la luz, tiempo después.
A manera comparativa, nosotros vamos por ahí generando "humanoides de gran estatura", pero sin alma.
Chicos que comienzan cada vez más temprano a: beber, fumar, tener una vida sexual sin conocimiento ni control, y todo lo que con esto llega.
Padres que trabajan duro pero ausentes, hogares vacios, chicos que crecen en soledad, que todo su mundo está frente a una pantalla al igual que su grupo social.
Haciéndolos cada más fríos, calculadores, egocéntricos, narcisistas y menos sociables y empaticos.
Transmitiendoles nuestros dolores y frustraciones bajo la figura de que sean fuertes y se preparen para la vida que no es fácil, sino todo lo contrario. Prohibidos de exteriorizar sus sentimientos, de sentir miedo, de mostrar debilidad....contaminadolos en dosis diarias y estos terminan siendo, toda obra nuestra.
Nos preguntamos luego,
¿En que me equivoqué?,
¿Que no hice bien?
¿Qué me faltó por hacer?
¡Si le di todo lo que pude!
¡Todo lo mejor! Etc.
Bueno:
Usted no le permitió vivir, que se equivocara, que se cayera, que sintiera dolor, que asumiera las consecuencias de sus decisiones, desestimó la autoridad, anuló a esa figura en la escuela o colegio, defendió el error con tal de protegerlo, tomo decisiones por ellos, los sobre protegio y terminó génerando un monstrito hecho a su medida.

 

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