TIEMPO, FELICIDAD, TRISTEZA


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Escrito por
@KOPSI

01/02/2008#N19963

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Cada vez que pienso en la palabra felicidad, viene a mi memoria esa vieja canción que decía “felicidad, ¿qué tal? ¿cómo te va?...”. Y estoy frente a una ventana en un bar...”mirando a la gente pasar”... ¡creo que hoy, definitivamente, es el día de recordar canciones!

Pero... ¿por qué recordar canciones cuando tengo extrañas mezclas de tiempo y gozo, de felicidad y tiempo? ¿Por qué relaciono felicidad con tiempo? ¿Será, quizás, por que fui muy feliz pero de a ratitos? ¿Por qué no encontré la fórmula para estirar la felicidad? ¿Existe acaso? Supongo que sí, que mucha gente es feliz durante mucho tiempo, y eso no depende de lo que se tiene sino de lo que se es. ¡Ya tuve que volver otra vez al ser!

Ah!, caramba, me parece que tras tanto divagar llegué a algo concreto, y no tiene (¿o sí?) nada que ver ni con la felicidad ni con el ser ni con el tiempo. Es plantear “lo que se tiene versus lo que se es”. Se puede tener mucho y no ser nada...y al revés también.

Lo material proporciona algo semejante a la felicidad, pero es un engaño y, además, pasajero. La felicidad es otra cosa. Alegra el alma.

La esencia de la felicidad es su rapidez, por eso es esquiva, difícil de atrapar. No busco la gran felicidad pero intento encontrarla en las pequeñas cosas, generalmente cotidianas que, sumadas, me la brindan.

¿Y el tiempo? El tiempo corre más rápido cuando soy feliz. No se detiene para dejarme saborear alegrías, pedazos de risas, trozos de carcajadas con estrellitas en los ojos.

¿Qué cosa, no? Pasan los años, y quedan recuerdos atados al tiempo porque nacieron juntos.

Mi felicidad se mide en instantes luminosos pero cortos. Espléndidos, como fogonazos: Una sonrisa, un gesto, un halago, una agradable sorpresa. ¡¡Qué pena que no supe o no pude adueñarme de la alegría permanente, de las miradas con chispitas, de las risas fuertes, de las carcajadas francas...y porque no supe beberla a grandes sorbos cuando la tuve conmigo!!

Y el tiempo, ese intruso que en todo está presente, se mezcla también con la tristeza. Decir tiempo y tristeza no es lo mismo que decir tiempo y amargura, dolor o desesperación, sino tan sólo tristeza.

Estoy triste por aquello que pudiendo haber sido, no fue. Me siento triste por algún recuerdo, por un hecho ya pasado que no se repetirá. Pero la mayor tristeza surge cuando me invade la sensación de que pudiendo haber hecho algo que hubiese modificado circunstancias, adopté una actitud pasiva.

Es un hecho de que hay gente constantemente triste. Sus días transcurren
semiclaroscuros, todo tiende a un gris, a un sepia. Estos seres viven aferrados a su tristeza. No conocen otro modo de vivir.

No me fascina ese modo de vida. Prefiero una sonrisa a un gesto adusto. Le otorgo a cada día que empieza un gran crédito. Nada es como parece y todo es muy relativo, y aunque esta es una frase muy usada, un clishé, encierra una gran verdad.

El tiempo, ese tirano que parece encogerse o estirarse según la ocasión. Con su paso alivia el dolor. Nos paraliza cuando parece detenerse. Se acelera cuando los momentos son felices, placenteros.

Nacemos en un tiempo y vivimos hasta que un día el reloj de nuestro tiempo se detiene...y pasamos a formar parte, definitivamente, del pasado porque dejamos de generar presentes.

Vivimos, creo, para hacer que nuestro tiempo no provoque tristezas a los tiempos ajenos. Aún así no ignoro que cuando el reloj de mi tiempo se detenga provocaré tristezas en algunos o en muchos.

Pero en esta gran rueda de la vida de los tiempos propios y ajenos, aún en las horas tristes, sé que hay un horizonte frente a mí, un horizonte que se llama futuro, un futuro del que no quiero saber nada por anticipado. En ese futuro están los futuros de todos, allí están los mañanas unidos a nuestros tiempos, a nuestros destinos, a nuestras vidas.

Por eso, sabedora de que mi futuro está frente a mí, pretendo vivir y no sólo transcurrir; inundar con alegría mis espacios propios y compartidos. Encontrarle el sabor a la vida… porque de eso se trata todo esto… ¿verdad?

 

Comentarios

@LUDAVITO

04/02/2008

Querida Kopsi: Me gustó mucho tu aporte, realmente se nota que brota desde adentro y creo que cualquiera que lo haya leído puede llegar a emocionarse con lo que decís. Un beso grande!! Luis Daniel  
@OJOSVERDES

04/02/2008

que buen texto kopsi, realmente transmitis mucha emocion... me dejo medio tristona, pero a pesar de eso, que lindo...