Imagina que te encuentras en una sala de conciertos escuchando los compases de música, de pronto recuerdas que se te olvido el telefono en tu automóvil, comienzas a preocuparte, ni sales de la sala ni disfrutas la música. He ahí la imagen de una forma de vivir. La vida para quienes tienen oídos es sinfonía pero es raro el ser que escucha la música, por qué está ocupada en escuchar los ruidos de las circunstancias y la programación introducida en su cerebro, y por sus apegos. El apego es uno de los principales maleantes. Si eres capaz de ver esto... sentirás el deseo de liberarte, amarás la vida, te apasionarás en ella, sentirás ligero el equipaje y habrás descubierto en tu corazón la respuesta. Anthony de Mello