, Noss sentimos inexplicablemente atraídos por alguien que apenas nos presta atención. Este fenómeno, lejos de ser una simple frustración amorosa, tiene bases psicológicas sorprendentes. Diversas teorías del comportamiento humano explican por qué, en ocasiones, el rechazo o la indiferencia pueden encender más nuestro interés que la reciprocidad.