A mi mujer ideal

Aún no ha salido el sol, pero la muerte de la noche es inminente.
para encender fuego con antigua brasa ardiente,
ya se encuentra mi amada en el fogón
con ese fuego, con esmero y con pasión
preparara el desayuno que espero ansiadamente.

El sol se insinua esplendoroso en el levante
son mis ultimos bostezos en la almohada
Ahi viene oh! mi dulce amada
con la bandeja de exquisiteses abundante
para que pueda desayunar sobre la cama

Mientras me desvelo, leo el diario, fumo un puro,
hace horas que esta ella trajinando.
Limpiando el piso, cebando mate, trabajando duro.
Dichosa se la ve, dichosa trabajando
para complacer al hombre del cual se esta enamorando.

Toma la sombra forma vertical
en este punto del universo,
aviva el fuego, mata un pollo, hecha sal,
bate, raya, y pela, como quien compone un verso
para servir a su amado, cual poema el almuerzo

le expreso mi aprobacion dada
Con una breve, complice mirada
a ese almuerzo que fue una fiesta.
Se levanta, friega, lava, seca, siempre atareada,
me retiro a dormir la siesta.

La entonces sombra vertical, va tomando inclinacion
el dia ve con temor, su inexorable agonia
se impone por condicion
para esta parte del dia
el mate hecho con emocion, por la mas dulce reina mia

Cuando la sombra predomina y la noche es certeza,
a reunirme voy con amigos,
truco, bochas, villar, tute cabrero y cerveza.
A mi amada doy libertad
para que cosa, borde, surza, teja.

Son horas de cerrazon, luz oscura.
A reencontrarme voy, con mi amada,
presuroso bajo la luna.
Siento la enorme fortuna
de tener la cena preparada.

la noche va lentamente, camino a su esplendor.
A mi reina apasionada,
le late el corazon con furor.
Me observa con carnivora mirada,
hoy no habre el cabaret, con ella hare el amor.

 

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