El secreto

Hacer las cosas con amor significa, entre otras cosas, emplear toda o gran parte de atención en la acción que estamos desarrollando.

Sin atención no hay amor. Donde está la dispersión no está el amor. Me refiero a la acción individual de cada uno. Si aceptamos que todo es amor, este no puede estar ausente.

Sin embargo una acción personal dispersa, no centrada, con la atención desorganizada no está conectada con el amor. Toda vez que el amor se manifiesta en nuestra acción podemos estar seguros de que nuestra atención está dedicada a esta acción.

Hacer las cosas con el amor significa dar. Cada vez que actuamos desde y con el amor estamos dando. En primer lugar damos nuestra atención y esto es un regalo muy valioso y cotizado por todo el mundo.

Dando nuestra atención entregamos, damos, parte de nuestro alma. Si esta acción nuestra se materializa en objetos materiales, dejamos una huella profunda en estos objetos.

Si se materializa en una interacción con otras personas dejamos unas impresiones (literales, como impresiones de los pies al caminar por el barro húmedo) en las consciencias de las personas con las que interactuamos.

Hacer las cosas con amor significa humanizar nuestro entorno, hacerlo más humano, más cálido, más habitable. El amor no es algo fofo o empalagoso.

Es algo que ayuda a crecer, a realizarse, a ver, a sentir más y mejor. A diferencia de la creencia muy difundida, el amor no produce dolor.

Pero sí invita a que seamos valientes, que afrontemos la vida con apertura, sintiéndola en directo, nos ofrece algo genuino en lugar de lo sucedáneo.

Hacer las cosas con amor significa respetar las diferencias y no imponer nuestras “verdades”. El amor es algo inclusivo, no contempla exclusividades, ni siquiera en las relaciones de pareja.

No excluye, incluye. Por eso mismo hacer las cosas con amor es un acto de responsabilidad y atrevimiento, también de libertad y madurez.

Hacer las cosas con amor no está reñido con el hecho de vender. Todo lo contrario, se vende más. Y se vende desde una base diferente a pesar de que el resultado, las ganancias obtenidas, es el mismo que cuando vendemos manipulando, que es el caso de la mayoría de las ventas en actualidad.

Hacer las cosas con amor nos abre las puertas para vivir una vida mejor aquí y ahora, sin demorarla, sin postergarla.