Dos policías quisieron arrancar un cajero automático

EN UN BANCO DE LOMAS DE ZAMORA



Dos policías quisieron arrancar un cajero automático para llevárselo


Son de la Bonaerense. Uno de ellos trabajó como custodio en la sucursal que iban a robar. No lo lograron porque sonó la alarma. Otros seis policías serán investigados por no arrestarlos cuando huían.

Había sido custodio del banco y con un colega policía planificaron un golpe audaz aunque poco inteligente: llevarse el cajero automático de la sucursal. Pero se olvidaron de un detalle tan importante como la alarma. Apenas comenzado el golpe, empezó a sonar y tuvieron que escapar a toda velocidad.

Los dos policías terminaron presos y otros seis (aunque no están detenidos) serán investigados, ya que están bajo sospecha por no haber actuado como debían para detenerlos.

Fuentes policiales confirmaron a Clarín que el robo ocurrió el lunes a la madrugada, aunque recién se dio a conocer ayer. Fue en la sucursal que el banco HSBC tiene en el centro de Lomas de Zamora, en avenida Meeks 41 a metros de la estación de trenes.

Voceros judiciales informaron que todo comenzó cuando dos oficiales (agente o cabo, según el viejo rango de la Bonaerense) de la comisaría 9ª de Lomas de Zamora entraron vestidos de civil al cajero automático del HSBC, que está ubicado en pleno centro comercial.

Los policías llegaron a la sucursal en un Jeep cargado con todo tipo de herramientas (amoladora, destornilladores, barretas y martillos, entre otras) cuando todavía era de noche. Según fuentes del caso, uno de los policías había trabajado habitualmente como custodio en ese banco.

Una vez adentro, los ladrones sacaron de un bolso la amoladora y empezaron a cortar las bases del cajero. Los investigadores creen que los frustrados ladrones tenían pensado arrancar el cajero automático de su base, cargarlo en el Jeep en el que llegaron y luego llevarlo a otro sitio para abrirlo sin problemas.

Pero mientras los policías trataban de arrancar el cajero, la alarma de la sucursal, que además está conectada con la Policía, se activó. "Por la vibración que produjo la amoladora cuando los ladrones intentaban arrancar el cajero se activó el sensor de movimiento de la alarma del banco", explicó un investigador.

Al sonar la alarma los ladrones salieron rápidamente del banco y escaparon en el Jeep que estaba estacionado en la puerta. En ese momento varios patrulleros con policías de la comisaría 1ª de Lomas de Zamora y 2ª de Banfield fueron hacia el banco.

Fuentes judiciales contaron a Clarín que a unas cuadras del banco dos patrulleros interceptaron al vehículo de los ladrones y los obligaron a bajar del auto con las manos en alto.

"Los ladrones le explicaron a los policías que intentaban detenerlos que eran oficiales de la comisaría 9ª de Lomas de Zamora, (en Parque Barón). Los dos mostraron sus credenciales y eso habría convencido a sus colegas, que los dejaron ir", explicó un investigador.

Los ladrones volvieron a arrancar el Jeep y se fueron. Pero sólo alcanzaron a hacer unos doscientos metros. Un patrullero de otra jurisdicción les volvió a cerrar el paso. Nuevamente los ladrones mostraron sus credenciales, pero esta vez no les bastó: fueron detenidos.

Los dos oficiales que intentaron robar el cajero quedaron detenidos a disposición del fiscal Diego Benedetto de Lomas de Zamora por intento de robo. Los seis que iban en los dos primeros patrulleros están acusados por haber incumplido con sus deberes al no arrestarlos, aunque se encuentran en libertad.

Según informó el Ministerio de Seguridad bonaerense los policías afectados son un teniente de la comisaría 2ª de Banfield, dos subtenientes, dos sargentos y un oficial de la 1ª de Lomas de Zamora.

Los seis policías fueron desafectados del servicio (sólo cobran el 50 por ciento de su salario) y serán investigados por la División Asuntos Internos. Si se determina que cometieron algún delito serán exonerados de la fuerza. Judicialmente no se adoptó ninguna medida sobre ellos.

 

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