VAMOS A TOMAR UN CAFE?
(Domingo 09/11/2014)

Mi nombre es Beatriz. Dicen que es de origen latino y significa “la que lleva alegría”. Nunca un nombre tan mal puesto para alguien que le cuesta no estar triste.

Hace un año y medio, me pregunté porque no tenía amig@s con quien salir o compartir un simple mate. Tenía conocid@s de internet de quienes veía sus novedades en face, pero no podía compartir más que eso. Me sentaba los fines de semana frente al televisor o en la computadora para charlar con nicks con los que la conversación duraba muy poco. Buscaba lugares donde ir pero o eran muy lejos para hacerlo sola o no perseguían el mismo deseo que yo buscaba.

 Averigüé comentando en un foro mi sentir y ganas de encontrarme con gente de mi zona y me di cuenta que no era la única. Entonces me propuse derrotar mi soledad y si era posible ayudar a que otr@s salieran de la suya.

Hoy me detengo después de dieciocho meses y veo que mi intención dio fruto. Tengo la inmensa alegría de saber que todos los domingos siempre habrá alguien esperando para compartir un café y que no estaré sola en mi mesa. La maravillosa sensación que se siente al abrir un mensaje que me pregunta “cómo estás” sin otra intención de darte una abrazo en la distancia. La impensada realidad que mi casa se llene de amigos y suene la música y las risas inunden cada rincón con energía.

Muchos pasaron por el cafecito, como lo llamo con gran cariño. Algunos solo para ver "que había", otros después de visitarnos no entendieron la necesidad de volver. Y hasta hubo quienes ni siquiera soportaron permanecer y se retiraron rápido con o sin excusa.

Pero lo que importa, es los que quedaron, los que siguen, a los que al igual que a mí, les alegra volver a vernos, Que un abrazón, aún sin saber que te pasó en la semana, tiene toda la carga para darte la fuerza para seguir adelante.

Hay personas con gran proximidad a mi corazón, y otras que quizás no seamos tan afines pero siempre nos hacemos la compañía para seguir.

Ante todo esto, tengo que dar gracias, a todos los que decidieron, eligieron quedarse y volver, y al igual que a mi, les dan estos encuentros las vitaminas de ánimo y alegría para pelear contra la soledad.

Que todo esto nos enseñe a todos, que nada se consigue de un día para otro, que en forma pacífica y quejándose no se encuentra la salida de los problemas. Que ya no estamos solos, pero todo fue producto de esfuerzo y  constancia de cada uno de nosotros.

Cuidemos lo que tenemos. Es un gran tesoro que no cotiza en ninguna moneda del mundo.    

Felicitaciones Beatriz !

Tanto por lo que sentís y expresás en tu escrito, como por lo que has/han logrado. Se nota en las fotos que son un hermoso grupo de personas muy contentas por reunirse. Sigan así y qué se amplíe el convite con más personas de buena voluntad !

Besos